domingo, 1 de mayo de 2016

All In de Lee Perk

Lee Perk ha publicado en Abril un disco soberbio. All In en Póker es como un Órdago en Mus, esto es, jugarse el todo por el todo. Pero All In es más que eso, es un compendio donde cabe todo el ROCK, sí con mayúsculas, un ejercicio de estilo, una clase magistral para principiantes impartida por Alfredo Niharra. Empezando por los pioneros de los años 50, y siguiendo con el pop/beat más clásico de los 60s. Música en vivo y en estudio. Letras en castellano y en inglés. Canciones originales y versiones. ¡¡¡Quién da más!!!

Las versiones elegidas (ambas grabadas en directo con su banda habitual: Juan López al bajo y Natxo Beltrán a la batería) dejan claras las preferencias de Lee Perk. Peggy Sue de Buddy Holly y los Crickets e If You Love Me Baby (interpretada por Juan), que también versionaron los Beatles en su primigenio álbum grabado en Hamburgo como banda de acompañamiento de Tony Sheridan.

Las cuatro canciones originales en castellano (dos de ellas en directo: Cadillacs, Buicks / Y Si No Hay Mañana, y las otras dos en estudio: Alma Vieja / Tras la Publicidad, con todos los instrumentos a cargo del propio Lee Perk) son cuatro temazos que deberían animarle a Alfredo a seguir por la senda del castellano, reconversión que ya hicieran con éxito cantantes/grupos tan dispares como Xoel López (antes Deluxe), Sidonie o Love of Lesbian. Y es que resulta más sencillo empatizar con canciones escritas en un idioma que no sólo reconoces, sino en el que puedes corear las letras hasta el hooliganismo y la afonía.

Cadillacs, Buicks es un homenaje al rock primigenio de los 50s. Construida sobre un potente riff, Lee Perk se declara converso confeso al Rock & Roll y su estilo de vida/filosofía. I Want You Around es otro ejercicio de memorabilia rock pero más en clave psicodelia sesentera. Y Si No Hay Mañana es un rockabilly en el que Alfredo muestra su desparpajo a la voz (Elvis) y versatilidad a la guitarra (palanca de vibrato incluida). One Good Reason es el descarado de Lennon solo en entonación/timbre/interpretación.

Alma Vieja es una excelsa balada en clave Beatle, a caballo entre los patrones compositivos de Lennon y Harrison (Across the Universe, Julia, Something, y por ahí). Alfredo se acompaña de la guitarra acústica y el contrapunto de la eléctrica es muy Harrison, remachando al bajo y órgano cada uno de los versos con exquisito gusto. La entonación en falsete emula el timbre de John (al inicio de la letra hay un guiño a Rubber Soul / Alma de Goma - el álbum más Lennon de los Beatles). Alfredo canta con un sentimiento superlativo y desborda los surcos del vinilo con su carisma.

La canción transmite un sentido de transformación, se capta el fin de etapa/viaje y la posterior presencia de una nueva oportunidad. En el solo hay ecos del fraseo/glissando incendiario de David "Pink Floyd" Gilmour en Fat Old Sun de Atom Heart Mother (una de las pocas canciones pop de los floyd en la etapa post-Syd Barrett, por otra parte). En línea con el clasicismo beatle perfectamente asimilado por Alfredo en bandas tributo como la extinta The Dolly Beatles y la actual Plastic Clono Band (muy recomendable), no sobra/falta ni una sola nota, y el gorgorito que cierra el tema te deja sin respiración.

Tras la Publicidad recuerda más al McCartney de Sergeant Pepper y el Álbum Blanco, quizás por el acompañamiento de piano, el pespunte del bajo, el arreglo de cuerdas y la abierta alegría del tema (del solo en particular). Un auténtico logro de Alfredo al imprimir humor musical a una ristra de malas noticias (¿A Day in the Life?). Prayin´ to Somebody Else´s God es un rezo/plegaria aderezado por el órgano Hammond y unos coros muy Beach Boys. En Please Take Care Alfredo se vuelve a embutir en el disfraz de McCartney en un alarde de facultades a medio camino entre el Magical Mystery Tour y Let It Be que se merecería figurar en un disco actual de Sir Paul.

Philosopher Stone es la balada que cierra el disco. Un homenaje a Harrison (Love You To/Within You Without You) de principio a fin con su aire místico (sitar/percusión). Tras una introducción/declaración de intenciones muy propio de la adaptación occidental de la filosofía hindú (cree en ti y serás capaz de cualquier cosa, y por ahí), la música deriva hacia un mantra (absorbente y envolvente como la espiral del eterno retorno de Zaratustra/Zoroastro) de una belleza sedante e inusual.

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